Hace unos días, tuve un encuentro con una frase que lamentablemente había olvidado e irrumpió nuevamente en mi cabeza, como una alarma encendida ! "El hombre inteligente no es el que tiene muchas ideas, sino el que sabe sacar provecho de las pocas que tiene." Anónimo
Se disparan un sin fin de ejemplos a partir de esta frase, me aparecen nombres, lugares, acontecimientos y básicamente vuelvo a evaluar situaciones con otros ojos, con otra perspectiva. Siento que el que escribió esa frase me conocía (aunque tengo claro que eso es imposible ;), también tengo claro que debo aprender mucho de esta frase, las pruebas me remiten su vigencia.

Respetar nuestras ideas y darles vida para transmitirlas, tomar cada una de ellas como si fuera única y transformarla en algo concreto y productivo para nosotros. Si por casualidad tenemos muchas, elijamos una por vez y a la elegida, todo nuestro esfuerzo, nuestra pasión y energía.
Quizás los casos o ejemplos más impactantes tengan que ver, desde mi punto de vista, con escritores, músicos o pintores que le dedicaron a sus ideas toda la vida, transformándolas en obras que muchos años después recién se transformaron en algo realmente grande y reconocido. O sea, no se quedaron especulando con el vendaval de ideas que surgían de sus mentes, simplemente se pusieron a convertirlas en obras que eventualmente se volvieron "maestras" y todo después incluso que sus vidas se hubiesen apagado.
Un buen ejercicio para practicar esto, es encontrar ideas que tengan como objetivo un fin social, o sea, mejorar las condiciones de vida de la comunidad que nos rodea. Tomemos una idea que genere un beneficio para la comunidad y saquémosle el máximo provecho. Cómo ? ...pida ayuda, cuéntela mil veces y vuelva a pedir ayuda, sume adeptos, compártala con los demás... Adquirir el hábito de emprender tiene el beneficio indirecto del "concretar"… el sentimiento del deber cumplido ..no tiene precio !!